El potasio es un mineral electrolito presente con niveles altos en la sangre. De hecho, es el tercer mineral que más abunda en el organismo.
Entre las funciones del potasio destaca el aprovechamiento y depuración de nutrientes, la regulación del nivel de agua y el desarrollo muscular. Además, también ayuda a contrarrestar los efectos perjudiciales del sodio en la presión arterial.
Los riñones son los órganos encargados de depurar el potasio para mantener un nivel adecuado en el cuerpo y no desarrollar hiperpotasemia. Es por eso que las personas con enfermedad renal crónica padecen muchas veces de exceso de potasio al no depurar la sangre correctamente, lo que puede desencadenar en una enfermedad cardiovascular.